San Alfonso Ma. de Ligorio - 1696-1787 - OBISPO, CONFESOR Y DOCTOR DE LA IGLESIA
Nuestro Señor reveló a Santa Isabel de Hungría que El concedería cuatro gracias especiales a los devotos de los dolores de Su Madre Santísima:
1. Aquellos que antes de su muerte invoquen a la Santísima Madre en nombre de sus dolores, obtendrán una contrición perfecta de todos sus pecados.
2. Jesús protegerá en sus tribulaciones a todos los que recuerden esta devoción y los protegerá muy especialmente a la hora de su muerte.
3. Imprimirá en sus mentes el recuerdo de Su Pasión y tendrán su recompensa en el cielo.
4. Encomendará a estas almas devotas en manos de María, a fin de que les obtenga todas las gracias que quiera derramar en ellas.
Meditar los siete Dolores de Nuestra Madre Santísima es una manera de compartir los sufrimientos más hondos de la vida de la Virgen María en la tierra.
San Alfonso Ma. de Ligorio - 1696-1787 - OBISPO, CONFESOR Y DOCTOR DE LA IGLESIA
Nuestro Señor reveló a Santa Isabel de Hungría que El concedería cuatro gracias especiales a los devotos de los dolores de Su Madre Santísima:
1. Aquellos que antes de su muerte invoquen a la Santísima Madre en nombre de sus dolores, obtendrán una contrición perfecta de todos sus pecados.
2. Jesús protegerá en sus tribulaciones a todos los que recuerden esta devoción y los protegerá muy especialmente a la hora de su muerte.
3. Imprimirá en sus mentes el recuerdo de Su Pasión y tendrán su recompensa en el cielo.
4. Encomendará a estas almas devotas en manos de María, a fin de que les obtenga todas las gracias que quiera derramar en ellas.
Meditar los siete Dolores de Nuestra Madre Santísima es una manera de compartir los sufrimientos más hondos de la vida de la Virgen María en la tierra.